POZA RICA, VER.- Con uno de los pre cierres de campaña de Pepe Yunes Zorrilla candidato a la gubernatura del estado por el PRIAN, quedó de manifiesto el chapulineo de Cecilia Guevara Guembe y su hijo Fernando Elías, quienes no mostraron ser genuinos en su convicción de trabajar por el pueblo.
También es evidente que este par de personajes oscuros de la política de Poza Rica y la región, solo están donde les dan el hueso y quieren concentrar todo el pinche poder para servirse con cuchara grande, tal como lo ha hecho el junior desde la SIOP y su mamá desde el congreso del estado pero con la bandera de MORENA.
Ahora están con los priistas y su coalición que está abajo por casi 30 puntos en el distrito, por lo que perderán el distrito, el estado y la república mexicana, pero después ya no tendrán para donde correr, pues ya no serán bien vistos en ningún partido, menos porque ya sacaron a relucir las viejas mañas priistas.
Pero cabe resaltar que no traen ningún peso específico ellos, que sí lograron la diputación de Cecilia fue por la marca MORENA, pero que ellos no tienen un liderazgo de representación popular, pero el pueblo los va juzgar y con estas escenas ha quedado mostrado su sed de poder y ambición desmedida.
Pero al no tener experiencia ni vocación política, calcularon mal, muy mal, al unirse a una coalición rota, sin posibilidades de triunfo y están firmando darle la espalda al pueblo, así como desaparecer en el escenario político. Entonces sus aspiraciones no eran para servir, eran para servirse, para utilizar los cargos que les dieran tan anhelada alcaldía en 2025, pero ahora se fueron con el más débil.
Estos eran unos lobos disfrazados de corderos, no se alinearon a MORENA, pero el que traiciona una vez traiciona dos veces, y de tal palo tal astilla, Fernando salió igual a la mamá, chapulín político, hace algunos años Cecilia Guevara se desvivía por el PRI, después por el PAN, e inmediatamente con el PRD, después con MORENA, y ahora regresó a donde es feliz con el PRIAN, que está más dañado que nada.