Mientras el robo de infraestructura urbana para venderla como fierro viejo es un problema latente en Poza Rica se puso en marcha un programa piloto de reemplazo las tapas de drenajes que en lugar de ser metálicas son de polietileno de alta densidad.
A través de la comisión de drenaje y alcantarillado se está realizando la instalación de las tapas de drenajes públicos en diferentes puntos.
Son diez tapas de polietileno que fueron donadas por un empresario y que estarán a prueba para poder considéralas en un proyecto más amplio.
Cada una de estas tapas de polietileno tiene capacidad de soportar hasta 15 toneladas de peso, por lo que podrían resistir la circulación de unidades pesadas.
La intención es que sirvan para reducir el número de tapas metálicas que desafortunadamente constantemente son robadas por personas que las venden como fierro viejo.